Al menos 57 solicitantes de asilo, incluidos menores, fueron hallados sin vida el martes luego de que se hundieron dos embarcaciones en el mar Mediterráneo frente a la costa del oeste de Libia. Los inmigrantes procedían de Pakistán, Siria, Túnez y Egipto.
El sobreviviente Bassam Mahmoud, un inmigrante oriundo de Egipto, describió los horripilantes momentos que vivieron previo al hundimiento de una de las embarcaciones. “Mientras el conductor giraba la embarcación, algunos pasajeros comenzaron a discutir con él. El peso se concentró en la parte delantera de la embarcación y no en la trasera, por lo que la embarcación se hundió. Empezamos a luchar por nuestras vidas gritando y pidiendo ayuda. […] [Lo que sucedió] fue una escena indescriptible. Le pido a las personas de mi país que ni se les ocurra probar hacer esto. Quédense en su país”.
Mientras tanto, en Túnez, los cadáveres de al menos 70 solicitantes de asilo, en su mayoría personas provenientes de África, han sido recuperados de las aguas cercanas a la ciudad costera de Sfax. Las autoridades locales dijeron que las morgues están al borde de alcanzar su máxima capacidad debido al creciente número de migrantes que se ahogan tratando de llegar a Europa en busca de seguridad.
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