Desde principios de 2024, el área afectada por los incendios ha superado ya los 1,3 millones de hectáreas, según datos del Laboratorio de Aplicaciones de Satélites Ambientales de la Universidad Federal de Río de Janeiro (Lasa-UFRJ).
El laboratorio ha emitido una alerta meteorológica de alto riesgo de incendio para la cuenca del Alto Paraguay, que se mantendrá hasta el 10 de agosto. El martes 6, la mayor parte de la región estaba bajo un riesgo extremo de que cualquier ignición pudiera convertirse en un incendio de gran magnitud, con "difícil control incluso mediante medios aéreos y alta velocidad de propagación", señala el informe.
Desde principios de agosto, las redes sociales han sido inundadas con imágenes del cielo teñido de rojo por el fuego o grisáceo por el humo, llamas avanzando por la BR-262 y cachorros de jaguar carbonizados, todas tomadas en el estado de Mato Grosso del Sur.
De acuerdo con el último boletín del gobierno estatal sobre las operaciones de vigilancia, combate y extinción del fuego, actualmente hay seis focos activos y dos áreas en vigilancia.
Uno de los focos, originado en Nhecolândia, una subregión del Pantanal en el municipio de Corumbá, Mato Grosso del Sur, ha concentrado los esfuerzos de los equipos de combate debido a su rápida expansión provocada por intensas ráfagas de viento en la región. El boletín destaca que "la situación es particularmente crítica en el Parque Estadual do Rio Negro y en las áreas ribereñas, amenazadas por la propagación del fuego".
Desde el inicio de la intensificación de los incendios en el Pantanal hace tres meses, un grupo operativo de aproximadamente 400 bomberos y agentes de los gobiernos federal y estatal trabaja en la región. Para combatir los incendios, los equipos también cuentan con 23 aviones, siete camiones, seis barcos y 44 camionetas.
Agencia Brasil