El resurgimiento del serotipo 3 del dengue (DENV-3) en Brasil luego de 17 años puede contribuir para agravar posibles brotes de la enfermedad en el país, ya que la población no se encuentra inmunizada contra este linaje y, al mismo tiempo, los serotipos 1 y 2 –DENV-1 y DENV-2– siguen estando en circulación.
Investigadores de la Famerp, la Faculdade de Medicina de São José do Rio Preto, en el interior del estado de São Paulo, formularon esta advertencia en un artículo publicado en el Journal of Clinical Virology.
“La última epidemia significativa de DENV-3 en Brasil y, más específicamente, en São José do Rio Preto, ocurrió hace más de 15 años [en 2007]. En tanto, los serotipos DENV-1 y DENV-2 siguen circulando continuamente en el país. En caso de que el serotipo 3 se afiance nuevamente y prevalezca este cuadro [de circulación simultánea de variantes], esto puede desembocar en formas severas de una epidemia de dengue. Es precisamente esta situación la que estamos viviendo en este momento en São José do Rio Preto”, sostiene en declaraciones a Agência FAPESP Maurício Lacerda Nogueira, docente de la Famerp y uno de los autores del estudio.
En el marco de un proyecto apoyado por la FAPESP, los investigadores han venido concretando durante los últimos 20 años la vigilancia genómica y epidemiológica del dengue y de otras arbovirosis (enfermedades causadas por virus transmitidos fundamentalmente por mosquitos) en São José do Rio Preto.
En la referida ciudad del interior paulista la circulación del dengue es endémica en las últimas décadas, y se caracteriza por el surgimiento de brotes causados por los diferentes serotipos virales.
“La temperatura media anual en São José do Rio Preto es de poco más de 25 grados y llueve aproximadamente 2.000 milímetros por año. Esta combinación de tiempo cálido y húmedo genera las condiciones ideales para la formación de reservorios de mosquitos transmisores de arbovirus, lo que también se erige como un sitio propicio para el monitoreo genómico y epidemiológico de las arbovirosis, como es el caso del dengue. Y debido a que trabajamos desde hace mucho tiempo, logramos hacer inferencias epidemiológicas mejores”, explica Lacerda Nogueira.
Mediante la vigilancia activa de arbovirus en pacientes con síntomas similares a los del dengue atendidos en el Hospital de Base de São José do Rio Preto y en las UPA (las siglas por la cual se las conoce a las clínicas de atención de la complejidad intermedia en la red pública de salud de Brasil), los investigadores observaron un aumento de casos de DENV-3 en la ciudad a partir de finales de 2023.
Treinta y una muestras extraídas entre noviembre de 2023 y noviembre de 2024 dieron positivo para DENV-3. Los síntomas más comunes de los pacientes fueron dolor muscular, cefalea y fiebre.
“Entre 2023 y 2024 tuvimos una epidemia de dengue en São José do Rio Preto, causada fundamentalmente por los serotipos 1 y 2. A mediados de 2024, el DENV-1 casi desapareció, el DENV-2 pasó a erigirse como el agente principal y los casos de DENV-3 empezaron a subir. Y actualmente éste es el principal agente acá en el municipio”, afirma Lacerda Nogueira.
El último brote de dengue en Brasil, en 2021, fue causado por DENV-1, cuya infección secuencial con DENV-3 mostró que estaba asociada al aumento de la gravedad durante una epidemia de dengue, según se consignó en estudios a cargo de otros grupos de investigación.
“No obstante, nosotros no hemos observado ese aumento de la gravedad entre los pacientes participantes en el estudio que llevamos a cabo”, ponderó Lacerda Nogueira.
Elton Alisson - FAPESP