Los mismo pidió en relación con otros tres investigados en la estafa. El Presidente y su hermana pegaron el faltazo a la audiencia con los estafados y se expusieron a una demanda civil.
Más de tres meses después de haber publicado el tuit que dio inicio a una estafa millonaria, Javier Milei empieza a sentir que las balas de la justicia le pican cerca. La jueza federal María Servini, a cargo de la causa $LIBRA, pidió ayer al Banco Central que levante el secreto bancario sobre las cuentas del presidente. La medida de la jueza alcanza también a su hermana Karina, que según consta en los registros de Casa Rosada recibió personalmente a los "criptobrós" involucrados en la estafa, a quienes Servini también mandó a congelarles las cuentas bancarias. El Presidente y su hermana, además, pegaron el faltazo a la audiencia de mediación a la que estaban convocados en el fuero civil, como antesala de una posible demanda millonaria por daños y perjuicios que impulsa un grupo de estafados en el país y en el exterior. Ni siquiera enviaron abogados, por lo que todo indica que se abrirá otra querella contra los Milei.
Serivini pidió ayer los informes bancarios en un legajo abierto de manera reservada y bajo secreto de sumario en lo vinculado al Presidente y su hermana, para investigar su evolución patrimonial ante las denuncias presentadas en la investigación que está delegada en la fiscalía federal de Eduardo Taiano. En el oficio se pide información desde 2023 al presente.
Página 12