Bajo presión para actuar ante el cambio climático antes de que sea demasiado tarde, los líderes de más de 120 países empezaron a llegar el lunes a Glasgow, en Escocia, para una cumbre previa a las negociaciones decisivas de la COP26. La cumbre debe actuar para "salvar a la humanidad", afirmó António Guterres, en la apertura de la cumbre de mandatarios, previa a las negociaciones técnicas. "Basta de cavar nuestra propia tumba", abundó. Tras él, el príncipe Carlos de Inglaterra, en substitución de la reina Isabel II, de 95 años, que "guarda reposo" por consejo médico, llamó a las empresas a sumarse al esfuerzo mundial: "Necesitamos una amplia campaña de tipo militar para reunir la fuerza del sector privado mundial" que "dispone de billones" de dólares, avanzó. El príncipe Carlos dijo estar "en pie de guerra" contra la crisis climática.
"La humanidad ha jugado durante mucho tiempo a contrarreloj con el clima" y ahora "es el momento de actuar", afirmó el primer ministro británico y anfitrión Boris Johnson. "Si fracasamos, nuestros hijos no nos perdonarán. Nos juzgarán con amargura, y tendrán razón", dijo Johnson a los 120 jefes de Estado y de gobierno reunidos hoy y mañana en la cumbre del clima de la ONU. "Estamos casi en la misma posición que James Bond, excepto que la tragedia es que esto no es una película y la cuenta atrás para el día del fin del mundo es real y el reloj está sonando", señaló el "premier". "Con dos grados más, pondremos en riesgo el suministro de alimentos. Con tres grados más, habrá más incendios descontrolados y cinco veces más sequías. Con cuatro grados más, diremos adiós a ciudades como Miami o Alejandría", añadió.
DW