Los gobiernos deben trabajar por igual en la mitigación, adaptación y financiación del clima. No pueden conformarse con el "mínimo común denominador", afirmó el titular de la ONU en Glasgow, donde las cruciales negociaciones sobre el clima se encuentran en su recta final. Al mismo tiempo, 13 países, entre ellos Costa Rica, lanzaban una nueva alianza para acabar con el gas y el petróleo, y, en otras salas, el tema de las ciudades era el centro de atención.
El Secretario General de la ONU, António Guterres, confesó este jueves a los delegados que se sentía inspirado por la movilización de la sociedad civil, incluidos los jóvenes, las comunidades indígenas, los grupos de mujeres, las ciudades y el sector privado, y destacó cómo la lucha por la acción climática requiere la participación de todos.
"Sabemos lo que hay que hacer. Mantener a nuestro alcance el objetivo de 1,5º significa reducir las emisiones a nivel mundial en un 45% para 2030. Pero con el actual paquete de contribuciones determinadas a nivel nacional, incluso aunque se apliquen en su totalidad, las emisiones seguirán aumentando en 2030", recordó a los participantes en un acto de alto nivel en la sesión plenaria.
A continuación, comentó el último análisis que han llevado a cabo varias agencias para el clima y el medio ambiente de la ONU, que muestra que, incluso aunque se asuman las últimas promesas y compromisos de la Conferencia sobre el Clima de la ONU, la COP26, estamos encaminados a un aumento del calentamiento global muy por encima de los 2º.
"Acojo con satisfacción el reconocimiento de este hecho en el acuerdo de cooperación entre Estados Unidos y China de ayer, un paso importante en la dirección correcta. Pero las promesas suenan vacías cuando la industria de los combustibles fósiles sigue recibiendo billones en subvenciones, según el Fondo Monetario Internacional. O cuando los países siguen construyendo centrales de carbón o cuando el carbono sigue sin tener precio", subrayó.
Guterres hizo un llamamiento a todos los países, ciudades, empresas e instituciones financieras para que reduzcan de forma "radical, creíble y verificable" sus emisiones y descarbonicen sus carteras, a partir de ahora mismo.
Aunque Guterres reconoció que los esfuerzos actuales para hacer frente al cambio climático están lejos de ser suficientes, destacó los avances logrados durante la COP26 en Glasgow, como el compromiso de detener y revertir la deforestación, varios compromisos de lograr las emisiones cero de las ciudades, y otras alianzas y promesas sobre la eliminación del carbón y la inversión en energías limpias en todo el mundo.
"Necesitamos que las promesas se pongan en práctica. Necesitamos que los compromisos se conviertan en algo concreto. Necesitamos que las acciones se verifiquen. Necesitamos salvar la profunda y real brecha de credibilidad", añadió, diciendo que, como ingeniero, sabe que las estructuras duraderas necesitan cimientos sólidos.
El Secretario anunció que creará un grupo de expertos encargado de proponer normas claras para medir y analizar los compromisos sobre emisiones cero de los agentes no estatales, que presentará una serie de recomendaciones el próximo año.
"Debemos ser capaces de medir los progresos conseguidos y de ajustarlos cuando se desvíen del camino (...) Ahora debemos centrarnos en la calidad y la aplicación de los planes. En la medición y el análisis. En la presentación de informes, la transparencia y la rendición de cuentas", dijo, pidiendo a los agentes que cooperen con la ONU y rindan cuentas entre sí.
"Sólo juntos podremos mantener los 1,5 º a nuestro alcance y el mundo equitativo y resiliente que necesitamos", concluyó.