El presidente Biden declaró el martes que considerará imponer sanciones personales contra el presidente ruso, Vladimir Putin, en medio de las crecientes tensiones sobre la situación en Ucrania. Rusia ha ordenado una serie de ejercicios militares, al tiempo que Estados Unidos y la OTAN aumentan su presencia militar en la región. Estados Unidos anunció que tiene previsto garantizar el suministro necesario de combustible a Europa en caso de que se imponga un embargo ruso. Mientras tanto, las autoridades ucranianas advierten que no debe cundir el pánico y dicen que no se ha tomado ninguna medida decisiva que indique que haya habido incursiones en su territorio. Unos 100.000 militares rusos se han desplegado cerca de la frontera con Ucrania en las últimas semanas. Biden abordó las crecientes tensiones en una rueda de prensa el martes.

El Presidente Joe Biden dijo: “Habrá enormes consecuencias para Rusia si [Putin] toma la decisión de invadir, como es capaz, todo el país, o mucho menos también, no solo en términos de consecuencias económicas y políticas, sino también graves consecuencias a nivel mundial. Si él movilizara todas esas fuerzas armadas, esta sería la invasión más grande desde la Segunda Guerra Mundial. Cambiaría el mundo”.

El portal periodístico The Intercept informa que legisladores demócratas de la Cámara de Representantes de Estados Unidos planean acelerar la redacción de un proyecto de ley que aumentaría la ayuda militar estadounidense a Ucrania en 500 millones de dólares y brindaría entrenamiento militar a las fuerzas ucranianas. Esto se produce al tiempo que asesores políticos de Rusia, Ucrania, Francia y Alemania mantendrán conversaciones este miércoles en París. Alemania ha sido más comedida que algunos de sus vecinos europeos en respuesta a esta situación crítica, ya que se ha opuesto a enviar armas a Ucrania y advierte contra la imposición de sanciones estrictas a Rusia.

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