El periódico The Wall Street Journal informa que el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, ayudó personalmente a forzar al presidente yemení, Abdu Rabbu Mansour Hadi, a dimitir a principios de este mes para conceder el poder a un nuevo consejo presidencial.
Un funcionario saudita le dijo al diario que el expresidente yemení está ahora bajo arresto domiciliario en Riad y que sus comunicaciones han sido restringidas.
Los rebeldes hutíes se han negado a reconocer al nuevo consejo presidencial. En los últimos seis años, la ONU estima que la guerra saudí respaldada por Estados Unidos en Yemen ha causado la muerte de casi 400.000 personas, muchas de las cuales murieron de hambre.
Democracy now