Casi siete meses después del inicio de la intervención rusa en Ucrania, los bombardeos continúan a un ritmo constante en Donetsk.
"Según datos preliminares, 13 civiles murieron tras un bombardeo punitivo" en el oeste de Donetsk, controlada por las fuerzas rusas y sus aliados separatistas desde 2014, indicó el alcalde de la urbe, Alexéi Kulemzin, en Telegram. Y añadió que seguía en curso el recuento de heridos.
De acuerdo con su información, entre las víctimas hay dos niños, indicó a su vez en el canal de televisión Rossía-24.
Kulemzin dijo que el ataque se produjo pasado el mediodía. "Nueve proyectiles de 155 milímetros fueron disparados desde la aldea de Netaylov", indicó, pidiendo a la población que "no salga si no es absolutamente necesario".
Estas declaraciones no pudieron ser verificadas de manera independiente por el momento.
DW