De mayo a junio, Brasil vio una disminución en su índice de precios al consumidor amplio, el IPCA, que fue reportado en -0,08% —el primer resultado negativo del año para la inflación, y el más bajo para junio desde el -0,23% de 2017—.
El resultado fue publicado el martes (11) por la oficina de estadísticas IBGE, con sede en Río de Janeiro, y es el cuarto mes consecutivo en que la inflación disminuye.
En mayo, el IPCA fue del 0,23%. En lo que va de año, el índice se sitúa en el 2,87%, frente al 3,16% en 12 meses, por debajo del 3,94% observado en los 12 meses anteriores.
Las principales categorías que contribuyeron a situar la inflación en terreno negativo a partir de mayo fueron alimentación y bebidas (-0,66%) y transporte (-0,41%), que aportaron -0,14 y -0,08 puntos porcentuales al índice general, respectivamente.
En el transporte, el descenso se debió a la caída de los precios de los coches nuevos (-2,76%) y usados (-0,93%).
"Los coches nuevos fueron la subpartida con mayor repercusión individual en el mes, -0,09 puntos porcentuales. Esta reducción está relacionada con el programa de precios de los coches nuevos (-2,76%) y de los usados (-0,93%)."
Agencia Brasil