El Programa Mundial de Alimentos ha advertido que el conflicto que actualmente azota Sudán podría desencadenar “la peor crisis de hambre del mundo” a menos que cesen los combates entre el Ejército sudanés y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido.
Funcionarios de la agencia de la ONU dijeron el miércoles que más de 25 millones de personas que se encuentran desperdigadas por todo Sudán, Sudán del Sur y Chad enfrentan una grave inseguridad alimentaria.
Mientras tanto, el empeoramiento de la violencia ha impedido que los trabajadores de ayuda humanitaria accedan a la mayoría de las comunidades sudanesas que experimentan “niveles de hambre de emergencia”.
Los envíos de ayuda humanitaria desde el Chad a la frontera occidental de Sudán se interrumpieron después de que el Ministerio de Asuntos Exteriores sudanés dijera que se temía que los combatientes del grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido habían llevado a cabo transferencias de armas a través de dicha frontera.
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