El Gobierno de Argentina, admitió que mantiene guardada una cantidad abrumadora de comida, que se niega a distribuir en un contexto de pobreza creciente.
Según las organizaciones, alcanzaría para varias semanas de abastecimiento para los comedores y merenderos. Grabois solicitó una inspección ocular a los galpones donde la ministra retiene la ayuda. Las versiones contradictorias de los ministros sobre los por qué del acopio. Los números de la subejecución presupuestaria.
La administración de Javier Milei confirmó que más de cinco mil toneladas de alimentos no perecederos permanecen retenidos en los galpones de distribución que posee el Ministerio de Capital Humano.
Se trata de mercadería que había sido adquirida a fines del año pasado por la gestión anterior, con el propósito de ser repartida entre los comedores y merenderos populares de todo el país, pero que por decisión de Sandra Pettovello quedaron simplemente en stock, desperdiciados. “Es una situación increíble, intolerable. Es inaudito que toda esa cantidad de comida esté guardada mientras en los barrios la gente se apila cada vez más para pedir un plato caliente. Lo que quiere Milei, y volvió a quedar claro, no sólo es llevar adelante un ajuste brutal, sino directamente romper el tejido social. No hay otra explicación para esta brutalidad”, le dijo a Página|12 Alejandro “Peluca” Gramajo, secretario general de la UTEP, organización que este jueves protagonizó una nueva “fila del hambre” frente a las oficinas de la ministra.
En conferencia de prensa, el vocero Manuel Adorni acusó recibo del informe que publicó el portal El Destape, en base a información pública de Capital Humano, con el listado de los alimentos que permanecen en desuso. “Efectivamente esos alimentos existen”, confirmó y hasta se dio el lujo de lamentarse que hayan quedado sin repartir. “Es una pena enorme”, dijo.
Página 12