El organismo de recaudación y control de delitos económicos de Argentina reducirá sus funciones. Al frente de la DGI nombraron a un ex funcionario acusado de evasión y lavado de activos
La Oficina del Presidente de la Nación anunció la disolución de la Administración Federal de Ingresos Públicos, AFIP, la cual será reemplazada por una estructura más reducida, la Agencia de Recaudación y Control Aduanero, ARCA. Este organismo contará con un 34 por ciento menos de plantel que la estructura actual, lo que podría generar el despido de miles de trabajadores.
"La creación de ARCA tiene como objetivo la reducción del Estado, la eliminación de cargos innecesarios, la profesionalización del ente, la destrucción de los circuitos corruptos y la mejora en la eficiencia de la recaudación y el control aduanero", señala el comunicado oficial de la Oficina del Presidente para justificar el nuevo hachazo en una de las áreas clave del Estado.
La AFIP no sólo es la encargada de la recaudación tributaria sino además tiene a su cargo una compleja red de controles que le permite, cruzando datos con otros organismos, detectar delitos financieros que de otra forma sería casi imposible descubrir.
"Esta medida reducirá en un 45 por ciento las autoridades superiores y en un 31 por ciento los niveles inferiores, lo que representa una eliminación del 34 por ciento de la estructura actual, generando un ahorro anual de 6400 millones de pesos", asegura el comunicado.
Página 12