La creciente y mortífera violencia de las bandas en la capital haitiana ha contribuido a la inseguridad alimentaria de más de un millón de personas en el país caribeño, dijo el martes la agencia alimentaria de la ONU.

En Haití, donde casi la mitad de la población ya padece inseguridad alimentaria, el hambre aumentará en medio de una inflación creciente, los altos costos de los alimentos y el combustible y el deterioro de la seguridad.

Además de sufrir de lleno la crisis mundial de alimentos y combustible causada por la guerra en Ucrania, en las últimas décadas, los haitianos han sufrido terremotos devastadores, tormentas tropicales, deslizamientos de tierra e inundaciones, además de la anarquía crónica y la impunidad de sus calles.

"La situación está fuera de control", dijo Jean-Martin Bauer, director del Programa Mundial de Alimentos (PMA) en Haití. "Grandes partes de Puerto Príncipe están controladas por las bandas; los datos que tenemos muestran que la situación en los últimos 90 días ha empeorado... teniendo en cuenta que partimos de un lugar muy vulnerable, con un millón de personas en situación de inseguridad alimentaria aguda en esta ciudad".

En conversación vía Zoom desde Puerto Príncipe, Bauer explicó que entre 150 y 200 bandas operan en la capital haitiana, y que las cosas "empeoran día a día" para los haitianos.

"Desde el viernes se han registrado combates en el centro de la ciudad, en la zona del puerto, en Cité Soleil, y ayer en La Saline; lugares que están en los alrededores del puerto y también cerca de donde viven cientos de miles de personas muy pobres".

El responsable del PMA citó el caso de una mujer en estado avanzado de embarazo tuvo que refugiarse en el suelo de su casa durante todo un día por miedo a quedar atrapada en el fuego cruzado durante un prolongado tiroteo. Al día siguiente, justo cuando pudo salir de su casa, alguien prendió fuego a su hogar. Más tarde dio a luz y ahora vive en un centro para desplazados.