A raíz de esto, en conjunto con la Fiscalía de Estupefaciente de 3° Turno, a cargo del Dr. Morosoli, se puso en marcha la operación “Troyano”.
Las tarea de inteligencia y vigilancia desarrolladas por los investigadores constataron un gran trasiego de personas en las viviendas investigadas, permitiendo confirmar la información recabada previamente en cuanto a la comercialización de estupefacientes y a la posible posesión de armas de fuego, no descartando que estas fueran utilizadas para fortalecer su posición de dominio en la zona en lo que respecta a su actividad ilícita.
Tras esto se tramitaron órdenes de allanamiento para cuatro puntos de esa zona, los que fueron efectivizados en la tarde del miércoles 29 de marzo.
Durante estos se detuvo a dos hombres mayores de edad, ambos carentes de requisitorias, al tiempo que se incautaron pasta base, marihuana, un fusil de asalto, una pistola 9 mm municiones, cargadores.
Tras ser puestos a disposición de la Justicia se cesó la detención de uno de ellos, al tiempo que se condenó a S.A.E.V. de 46 años “como autor penalmente responsable un delito de asistencia a las actividades del narcotráfico previsto en el art. 33 de la Ley 19.574 (en la redacción dada por el art. 121 Ley 20.075) en régimen de reiteración real con un delito de tráfico interno de armas y municiones conforme el art. 9 de la Ley 19.247 a la pena de dos años y ocho meses de penitenciaría con descuento de la preventiva sufrida, con suspensión de sus derechos políticos”.