El lunes, la directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell, informó al Consejo de Seguridad de la ONU sobre la situación humanitaria en Gaza, y advirtió que los ataques israelíes contra la Franja están matando o hiriendo a más de 420 niños y niñas cada día, una cifra que, según Russell, debería “conmovernos a cada uno de nosotros hasta la médula”.
“Imploro al Consejo de Seguridad que adopte de inmediato una resolución que recuerde a las partes sus obligaciones en virtud del derecho internacional, que pida un alto el fuego, que exija a las partes permitir que se establezca un corredor humanitario seguro y libre de obstáculos, que exija la liberación inmediata y segura de los seis menores que fueron secuestrados, y que inste a las partes a brindar a los menores la protección especial a la que tienen derecho”, dijo Russell.
Las autoridades sanitarias de Palestina afirman que más de 8.500 personas, en su mayoría mujeres, niños y niñas, han perdido la vida en los últimos 26 días. El lunes, un avión de combate israelí bombardeó el Hospital de la Amistad Turco-Palestina, el único hospital de Gaza que atiende a pacientes con cáncer. El ataque provocó un incendio en parte del edificio y dañó equipos médicos, lo que provocó una fuerte condena por parte de Turquía. En las últimas 24 horas, los bombardeos israelíes también impactaron cerca del Hospital Europeo y del Hospital Indonesia, y destruyeron varias viviendas de los alrededores del Hospital Al-Quds, donde hay unos 14.000 palestinos refugiados.
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