La Intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, afirmó que lo mejor del ser humano "se expresa entre nosotros, todos los días, de las más diversas formas que nadie puede explicar. Es el arte que nos invade, de alguna manera" y agregó ejemplos "como una pincelada que no podemos explicar, con acordes y silencios que no sabemos muy bien de dónde salen, y por eso, a veces, parece que el artista, en vez de ser dueño del arte, también está al servicio del arte".
Cosse también reflexionó sobre el hecho de que muchos artistas dejan de ser dueños de sí mismos y son parte de la comunidad "y este es un momento en que toda la comunidad de Montevideo se honra en ofrecerte, solicitarte y pedirte que aceptes ser Ciudadano Ilustre de nuestra querida Montevideo".
Eduardo Da Luz afirmó que "hoy es uno de los mejores días de mi vida" y agradeció el homenaje ante un teatro Solís lleno en el marco del Día Nacional del Candombe, la Cultura Afrouruguaya y a Equidad Racial.
La distinción de Ciudadano Ilustre de Montevideo al músico, compositor y director afrouruguayo, Eduardo da Luz, que con 60 años de trayectoria ha dedicado su vida a valorar, promocionar, difundir el candombe y la cultura afrouruguaya a través de su música y su militancia.
Eduardo da Luz nació el 9 de febrero de 1954. Es cantante, guitarrista, compositor, director coral y director de espectáculos con 60 años de trayectoria a nivel nacional e internacional.
Creador del reconocido tema popular “Sinfonía de tambores”, en la década del 70 comenzó a salir en carnaval, vinculándose con los barrios Sur y Palermo y en el año 1974 comenzó a escribir, a hacer arreglos y dirigir para comparsas de carnaval como Serenata Africana, Marabunta, Kanela y su Barakutanga, Senegal, Sinfonía de Ansina, Concierto Lubolo, Tanganica, Raíces, entre otras. Fue elegido presidente del Sindicato de Carnavaleros “SUCAU”.
En épocas de resistencia forjó un gran compromiso social. Terminada la dictadura militar, junto a su guitarraacompañó y abrazó cientos de causas populares en forma totalmente solidaria, compartiendo su arte donde lo necesitaran, en cooperativas, organizaciones de la sociedad civil, sindicatos o escuelas.
Forjó un prestigio en el mundo del carnaval, en el que llegó a obtener 13 primeros premios y 20 menciones,como compositor, como arreglador musical, como figura de carnaval, como figura dentro de la categoría.
Para sus creaciones estudió las raíces afro, en libros sobre la comunidad africana en la época colonial, cómo hablaban el dialecto bantú, proyectando cómo se podría haber ejecutado la música en esa época y recreando el llamado original, rescatando lo que pasaba en Navidad o Día de Reyes, cuando la comunidad africana salía a cantar y bailar uniendo aquel mundo original con el candombe.