Participarán de la ceremonia el intendente (i) de Montevideo, Federico Graña; la directora de Cultura, María Inés Obaldía; y la alcaldesa del Municipio B, Silvana Pissano. La apertura artística será realizada por el cuerpo de baile tradicional Timbó y culminará con un espectáculo del dúo Larbanois y Carrero.
El Espacio Patrimonial Casa de Artigas se concibe como un centro cultural de valor patrimonial, cuya gestión se articulará con base en un modelo asociativo o comunitario. Se trata de un área de alto valor simbólico por hallarse en el predio que ocupó el solar de la familia Artigas –una de las familias participantes del proceso fundacional de la ciudad– y, por tanto, el lugar donde nació José Artigas.
El Espacio Patrimonial Casa de Artigas fue pensado como un proyecto de difusión y exposición, con un modelo de Gestión Asociada o Comunitaria, en el que será posible conocer no solo cuestiones vinculadas a la vida de José Artigas, sino, particularmente, elementos de la vida cotidiana de Montevideo a lo largo de casi toda su historia urbana.
Para su uso como centro cultural y de exposición de los restos hallados del antiguo rancho de los Artigas, mediante elementos de la propuesta museográfica para la puesta en valor de esos y otros hallazgos arqueológicos, el edificio cuenta con elementos expositivos de diverso tipo.
En ese sentido, se incorporaron recursos técnicos y equipamientos para realizar reuniones y otras actividades con pequeñas audiencias, para orientar su actividad a la articulación con el territorio en el que se enclava sin perder la relación con el conjunto de la ciudad.
El modelo de gestión asociada ofrece oportunidades para la toma de conciencia sobre el territorio, en sus diversas dimensiones y expresiones, y contribuye a que las comunidades se apropien de los procesos de negociación con la memoria y de construcción de narrativas dialogantes, lo que aporta al desarrollo de maneras creativas y proactivas de la ciudadanía.
Estas formas de concebir la gestión de lo patrimonial habilitan al disenso y el debate, estimulan la iniciativa comunitaria en la puesta en valor, promoción y protección de bienes tangibles e intangibles y, sobre todo, suponen que quienes detentan esos bienes toman conciencia de su propio valor, un factor de afirmación comunitaria para quienes integran las comunidades como sujetos de derecho.