Lo más importante que arrojó el examen fue que el incendio no fue un accidente, hipótesis que hasta ahora se había manejado por parte de las autoridades. Nieto y Cabrera aparecieron calcinados en su casa de descanso en Garzón, luego de que llegaran allí con el fin de limpiar la vivienda. El perito indicó que, por la posición de los cuerpos, todo indica que en la escena tuvo que estar “un tercero”. Además, no se encontraron registros de combustible sobre la estufa y los elementos que estaban sobre ella no fueron afectados por el fuego.

La pericia, entre otras de las conclusiones, arrojó que se nota la utilización de gasoil en la escena. De hecho, insiste en que se halló “mucho gasoil”, por lo que los abogados de la familia no descartan que la presunta tercera persona haya rociado los cuerpos con el combustible para luego prenderlos fuego.

De igual forma, ahora será la Fiscalía quien deba dilucidar los hechos luego de incorporar la pericia a la casa. La abogada de la familia, Ana Silvia Rodríguez, dijo a Subrayado que el caso ya no se enmarca en especulaciones porque la pericia es una prueba.

“Concluye de manera terminante que no se trató de un accidente y eso nos coloca en otra posición. La pericia es prueba y, si bien la aportaron al expediente que se está tramitando en Fiscalía las familias de Mario y Mercedes, es igual de oficial que cualquier otra prueba”, añadió la defensora.

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