El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva declaró este martes (24) que los líderes mundiales siguen atrapados en un ciclo de ineficacia en sus esfuerzos por abordar los problemas globales.
Al inaugurar el debate de jefes de Estado en la 79.ª Asamblea General de la ONU, en Nueva York, Lula hizo referencia al "Pacto para el Futuro", un documento adoptado por los países para impulsar la cooperación internacional.
"La difícil aprobación de este pacto refleja el debilitamiento de nuestra capacidad colectiva para negociar y dialogar. Su alcance limitado es también una expresión de la paradoja de nuestra era: damos vueltas en círculos entre compromisos posibles que solo producen resultados insuficientes", señaló Lula.
El mandatario lamentó que ni siquiera la crisis del covid-19 lograra unir a las naciones en torno a un Tratado de Pandemias bajo la Organización Mundial de la Salud. "Debemos ir mucho más allá y dotar a la ONU de los recursos necesarios para enfrentar los vertiginosos cambios del escenario internacional", subrayó.
Lula considera que la crisis de gobernanza global requiere de transformaciones estructurales, una responsabilidad que recae sobre la Asamblea General, "la mayor expresión del multilateralismo". Recordó que la Carta de las Naciones Unidas, que está cerca de cumplir 80 años, nunca ha sido reformada integralmente. En el momento de su creación, la ONU tenía 51 países miembros; hoy cuenta con 193.
"La versión actual de la Carta no abarca algunos de los desafíos más urgentes de la humanidad", afirmó, mencionando los numerosos conflictos armados que amenazan con escalar a enfrentamientos globales.
Lula también destacó que cuando se fundó la ONU, muchas naciones, en su mayoría africanas, estaban bajo dominio colonial y no participaban en su formulación ni funcionamiento. Además, criticó la falta de equilibrio de género en la organización, señalando que ninguna mujer ha ocupado el puesto de secretaria general.
"Nos acercamos al final del primer cuarto del siglo XXI con unas Naciones Unidas cada vez más vacías y paralizadas. No bastan ajustes superficiales; es necesaria una revisión profunda de la Carta", sostuvo Lula.
Brasil propone transformar el Consejo Económico y Social en el principal foro para abordar el desarrollo sostenible y la lucha contra el cambio climático, con capacidad para influir en las instituciones financieras globales. Asimismo, Lula abogó por revitalizar el papel de la Asamblea General en cuestiones de paz y seguridad internacionales, fortalecer la Comisión de Consolidación de la Paz y reformar el Consejo de Seguridad, enfocándose en su composición, métodos de trabajo y el derecho de veto, para hacerlo más eficaz y representativo de la realidad actual.
Agencia Brasil