La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner confrontó, una vez más, con el presidente Javier Milei por la política económica que desarrolla.
Pero sobre todo, en esta carta expresó por primera vez su interés por la presidencia del Partido Justicialista. "Quiero agradecer a todos los compañeros y compañeras las muestras de cariño y los mensajes de apoyo para ser la Presidenta de nuestro partido.
Nunca he ocupado un lugar sin tener la certeza de estar capacitada para la tarea encomendada; sin miedo ni presiones", dijo y agregó: "Estoy dispuesta, una vez más, a aceptar el desafío de debatir en unidad porque si algo tengo claro es que acá no sobra nadie". Sin embargo, advirtió que "la unidad necesita dirección y proyecto para construir el mejor peronismo posible en una Argentina que se ha vuelto imposible para la mayoría de sus habitantes".
A lo largo del documento, CFK dijo que es necesario que el PJ funcione como instrumento para reagrupar "a todas las fuerzas políticas y sociales" detrás de un programa de gobierno que pueda "devolver la esperanza y el orgullo de ser argentinos ante la crueldad y el odio de los necios", y mencionó, además, que la unidad será la clave para lograr ese objetivo. Sin embargo, opinó que esa unidad debe tener dirección y un proyecto claro. "Lograr ello no es un objetivo en sí mismo", explicó. Ese, justamente, es un punto que no fue debatido en 2019 --cuando se creó el Frente de Todos, y Alberto Fernández fue el candidato a presidente--. Con esa experiencia a cuestas, la exvicepresidenta habló de la necesidad de discutir "un programa", más allá de candidaturas.
Página 12