Miércoles, 09 Octubre 2024 11:20

Nuevas unidades penitenciarias en Libertad

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Un paso hacia la modernización del sistema penitenciario uruguayo.  

El Ministerio del Interior dio inicio a la construcción de las unidades penitenciarias N.º 27, 28 y 29 en Libertad con la colocación de la piedra fundacional, un acto que simboliza un avance significativo en la transformación del sistema de rehabilitación del país.

En una ceremonia marcada por la presencia del ministro Nicolás Martinelli, junto a su Comando, del director del Instituto Nacional de Rehabilitación, Luis Mendoza, y su Comando, del comisionado parlamentario, Juan Miguel Petit, y representantes de las empresas del Consorcio PPP Libertad, se subrayó la importancia de estas nuevas instalaciones, generadas bajo un régimen de participación público-privada.

El ministro Martinelli destacó que cada unidad contará con 460 plazas, con posibilidad de ampliación, con lo que será un centro penitenciario de 1.716 plazas genuinas. Estará equipada para ofrecer una amplia gama de actividades educativas, deportivas y socio-laborales. "El objetivo es romper el ciclo de reincidencia a través de un enfoque que promueva la reinserción social", afirmó el ministro.

Además, la celdas cuentan con un sistema constructivo moderno que elimina el uso de hierro, reduciendo así los riesgos de cortes carcelarios y actos de violencia entre reclusos.

Durante la rueda de prensa posterior al acto, Martinelli se refirió a los desafíos del sistema carcelario y la necesidad de avanzar en políticas que mejoren las condiciones de vida dentro de las cárceles. Resaltó que, a diferencia de gestiones anteriores, se está trabajando en la incorporación de tecnología y en el fortalecimiento de programas de rehabilitación, que se reflejan en la disminución de delitos y un aumento en la confianza de jueces en medidas alternativas a la prisión.

El diseño de estas nuevas unidades penitenciarias se inspira en modelos internacionales que priorizan la seguridad y el bienestar de los reclusos, evitando el contacto directo entre guardias y detenidos.

La construcción está proyectada para finalizar en 18 meses, y se espera que marque un cambio de paradigma en el tratamiento de personas privadas de libertad en Uruguay.